Por: Marcos Torres.
Tengo un gran amigo que es “guardia”.
Sí. Así nos referimos a los miembros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias en Cuba.
Ambos transitamos juntos las enseñanzas primaria y secundaria y nos convertimos en mejores amigos en esa etapa de nuestras vidas. Practicamos deportes juntos (judo de hecho) y gozábamos de una amistosa rivalidad en el tatami que contribuyó a una amistad sin límites y a más de un dolor en las articulaciones y costillas.
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